la Terapia Asistida con Perros consiste en la realización de un programa de apoyo y/o rehabilitación donde el perro actúa como una herramienta terapéutica más en los tratamientos psicológicos o físicos ya establecidos. Es un soporte eficaz que rompe las barreras y paradigmas entre terapeutas y usuarios/pacientes.
El objetivo de la terapia es la mejora de los usuarios/pacientes en los campos para los que el programa se ha diseñado, ya sean físicos, sociales, emocionales o cognitivos.
La TAA puede ser dirigida por un profesional de la Salud o de la Educación Especial. Es un instrumento para la prevención de la disfunción y/o mantenimiento o mejora de la función o calidad de vida. Al emplear perros para llevar a cabo la TAA podemos apreciar numerosos beneficios psicológicos, científicamente probados, que evidencian efectos positivos como consecuencia del contacto con perros.
1. Orientación a la realidad.
2. Punto focal para trastornos de déficit de atención.
3. Mejoría del estado de ánimo.
4. Antídoto para la depresión.
5. Estímulo social.
6. Necesidad de contacto físico.
7. Salirse de uno mismo.
8. Algo con qué ilusionarse.
9. Aumento de la empatía y autoestima.
10. Vínculo.
11. Aceptación.
12. Estímulo mental.
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